Es en definitiva y sin lugar a dudas uno de los más G-R-A-N-D-I-O-S-O-S destinos de sudamérica que no en vano recibe miles de turistas que quedan satisfechos todos los años.
Una ciudad que, como la torre de babel, tiene gente de todas las nacionalidades hablando en distintas lenguas, todos bajo la misma fascinación de encontrarse en lo que alguna vez fue el centro del imperio inca.
Cusco, Cuzco o Qosqo se escribe de cualquiera de esas maneras y significa ombligo, en alusión al ombligo del mundo, que es como se le consideraba. El imperio incaico se extendió sobre un territorio llamado Tawantinsuyo que se extendía desde el actual Ecuador hasta Santiago de Chile. El centro de este imperio fué esta misma ciudad, la cual hoy en día continúa siendo uno de los principales centros de atención de la cordillera de los andes.
Caminar por las calles de la ciudad de Cusco es disfrutar de sus pedregosas pistas y angostos callejones con angulosas piedras incaicas. Es respirar un fresco aire helado bajo un intenso cielo azul con nubes que parecen algodones flotantes.
Cada calle del centro tiene historia que narra cultura, creencias, sufrimiento, batallas, opresión, dogma, ritos y sincretismo. Hoy en día se fusionan las antiquísimas paredes incaicas con las construcciones coloniales y las modernas tienditas de souvenirs, restaurantes, agencias de turismo y hoteles. Así pues, en Cusco se precibe mucha humanidad y facetas distintas del hombre a lo largo de la historia.
Esta es la ciudad que se amolda a todos, o de alguna manera son sus visitantes los que terminan siendo absorbidos por su encanto. Hay rincones para quienes quieren la tranquilidad, como para quienes quieren la intensa diversión nocturna. Los extremos son notables y declaran la condición cosmopolita de esta ciudad.
Pero Cusco es más que una ciudad. También es un departamento peruano que incluye lugares como las ciudades del Valle Sagrado, el Santuario de Machu Picchu, y la ciudad del centro de la que hablo. Cusco es grandioso y hay que conocerlo. Su belleza es casi inalcanzable por lo que no en vano es el punto de partida para una infinidad de circuítos turísticos aledaños que incluyen visitas al Manu, Choquequirao, Machu Picchu, Valle Sagrado, etc.
Las actividades también son abundantes pudiendo practicarse rafting, trekking, ciclismo, parapente, motocross, salto bungee…
Hay que venir, vivir, sentir y disfrutar de una gran experiencia turística en un lugar como Cusco.
