Cuando me dispuse a ver mis correos esta mañana me dio una flojera terrible responderlos. Eran demasiados. Y tengo el habito de responderlos todos siempre.
Hacia un sol maravilloso entrando por la ventana, así que era resplandecer bajo el brillo del monitor o disfrutar de un poco de sol al aire libre.
Cerré todo y salí.
Ahora me encuentro escribiendo esto en lápiz y papel para pasarlo luego a la web cuando tenga tiempo.
Para cuando leas esto yo estaré muy lejos del monitor, de Facebook y de toda la abundante información inagotable de internet que a veces satisface mas la curiosidad que la necesidad.
No me malentiendas, me encanta internet. Pero no vas a negar que a veces gastamos mucho tiempo útil haciendo cosas inútiles en este espacio. Es importante tener control de nuestro tiempo para no dejarnos distraer por las cosas banales y superfluas que nos dejan en el mismo punto de partida.
La mayoría de gente usa el tiempo de trabajo para trabajar y el tiempo libre para «huevear». De esta manera nunca tienen la oportunidad de salir del circulo vicioso de la rutina. Y es que asi obviamente no tienen tiempo de pensar como ser productivos en sus ratos libres ni tampoco saben como liberarse de las obligaciones laborales.
Yo he aprendido que lo ideal es alcanzar todo lo contrario: Huevear en el tiempo de trabajo y trabajar en el tiempo libre.
¿Quien no querría vivir así? Un trabajo que sea tan relajado que ni se siente, y un tiempo libre que uno usa de manera productiva y utilitaria. Una vida tan ultra light que ni te das cuenta de cuando estas trabajando y cuando trabajas lo haces con gusto.
Si crees que eso es imposible o no existe, es porque eres de los del primer grupo. De los que trabajan en tiempo de trabajo y huevean en el tiempo libre. Si te interesa cambiar esa situación, deberías utilizar tu tiempo libre en hacer muchos cruces de ideas y escanear las oportunidades de la vida. Esta de mas decir que todo esto trata de hacerse independiente y de no trabajar como empleado. Los empleados casi siempre tendrán horarios fijos, sueldos fijos, escritorios fijos. Hay gente a la que le gusta ser empleado.
Me dirijo mas bien a quienes odian la idea de ser empleados.
He visto a través de mis viajes que hay grupos culturales criados, educados y preparados para ver el hecho de ser empleado como algo positivo en sus vidas. Hay por otro lado, muchas ciudades en donde la economía desequilibrada y el desempleo resulta muy estimulante para que aparezcan pequeños empresarios, inversionistas independientes y negociantes.
A pesar de ello hay negociantes independientes que terminan esclavos de sus propios negocios. Como el dueño de una importadora de telas que vi la semana pasada, atendiendo en su propia tienda llena de miles de dólares en importaciones y mercadería. En una galería que olía a químicos, con un calor sofocante, trabajando de lunes a domingo para cuidar su mercadería donde esta el dinero de toda su vida, para pagar la escuela de sus hijos, para mantener a su familia, para satisfacer los pedidos que le llegan todas las semanas, para crecer enormemente, para pagar sus prestamos del banco, para terminar metido en el mismo lugar donde lo vi dos años atrás en las mismas condiciones.
Es un tema que finalmente requiere de mucho control. No dejarse seducir por el dinero también es importante ya que las ganancias positivas pueden ser absorbentes y adictivas quitándote lo esencial. El dinero es solo un accesorio para avanzar cómodamente inserto en un sistema capitalista.
Valora el tiempo de vida que se te ha otorgando. Úsalo mas sabiamente y con menos superficialidad.
Valora tu salud. Todos los seres vivos nos desgastamos con el tiempo hasta la muerte. No existe la belleza eterna, sino la belleza del ahora. Así que pon bien en alto tu autoestima.
Valora el amor. Rodéate de quienes amas. Pasa tiempo con ellos. Encuentra nuevas personas para amar. Haz el amor todas las veces que puedas antes de morir.
