«Me veras volar
Por la ciudad de la furia
Donde nadie sabe de mi
Y yo soy parte de todos
Nada cambiara
Con un aviso de curva
En sus caras veo el temor
Ya no hay fabulas
En la ciudad de la furia
Me veras caer
Como un ave de presa
Me veras caer
Sobre terrazas desiertas
Te desnudaré
Por las calles azules
Me refugiaré
Antes que todos despierten
Me dejarás dormir al amanecer
Entre tus piernas
Entre tus piernas
Sabras ocultarme bien y desaparecer
Entre la niebla
Entre la niebla
Un hombre alado extraña la tierra
Con la luz del sol
Se derriten mis alas
Solo encuentro en la oscuridad
Lo que me une con la ciudad de la furia
Me veras caer
Como una flecha salvaje
Me veras caer
Entre vuelos fugaces
Buenos Aires se ve tan susceptible
Ese destino de furia es
Lo que en sus caras persiste
Me dejaras dormir al amanecer
Entre tus piernas
Entre tus piernas
Sabras ocultarme bien y desaparecer
Entre la niebla
Entre la niebla
Un hombre alado prefiere la noche
Me veras volver
Me veras volver
A la ciudad de la furia»
La gran capital se ve infinita y preciosa desde el cielo nocturno. Como una gran sábana de joyas ordenadas en cuadrantes, con luminosas estrellas tratando de brillar una mas que otra.
Desde las calles, uno se sumerge en la civilización que trata de inmolar sus mensajes con los avisos publicitarios sobre los edificios. El obelisco se yergue entre las avenidas 9 de Julio y Corrientes como intentando incrustarse en el cielo.
Buenos Aires es una de las capitales de mayor historia y tradición de América Latina. Entre sus calles se aprecia cultura impregnada en cada cuadra, así como una contestataria voz popular que busca hacerse escuchar constantemente. En cada cuadra se encuentra al menos una librería, y cerca de cada monumento, al menos un graffiti.
Los mensajes callejeros denuncian el imperialismo y exigen con determinación que se escuchen las exigencias del pueblo. A pesar de las crisis económicas sufridas, Argentina muestra una aguerrida actitud de venta de ideas y de productos que le vienen marcando un claro camino hacia la estabilización.
Pero vamos a lo mundano y terrenal…tenemos la suerte de caminar por estas calles con interminables cosas por ver. Un bife con guarnición va desde los 6.50 pesos!, suena bien. Las cervezas son baratas y el vino ni que decir. El mate se consume adictivamente y se encuentra en cada esquina. Hablando de esquinas; pintorescos kioskos de periódicos y revistas se encuentran siempre al andar, junto con estaciones para tomar el Subte (conocido en Chile como Metro). Hermosas son las bonaerenses que decoran las calles de la capital, aunque para quienes tienen gustos diferentes, travestis tambien hay. Según leí en una guía de Buenos Aires, esta es la primera ciudad de Latinoamérica en permitir la unión legal de parejas homosexuales por lo que se ha convertido en uno de los destinos turísticos favoritos para lesbianas y gays.
Así de variada, cosmopólita y distinta es la capital. Nos dijeron que el tránsito de esta ciudad era caótico; pero comparándolo con el de Lima no llega ni a la mitad.
Buenos Aires nos da la bienvenida para explorar, investigar y comenzar a descubrir; grandísima ciudad !