Una de las cosas más provechosas de estar en la selva es la de poder disfrutar de los alimentos más saludables del planeta. En la mayoría de los casos libres por completo de pesticidas, fertilizantes y manipulaciones que alteren el valor nutritivo.
A diferencia del café colombiano y brasilero que son los de mayor exportación mundial, el café peruano ha ganado los principales premios y certificaciones internacionales de calidad. Desayunar este delicioso café, con leche fresca de vaca, asi como miel orgánica es un manjar que no se encuentra fácilmente en cualquier parte del mundo.
La agricultura de esta zona se destaca por mantener estándares orgánicos que en su gran mayoría son la ambición de un mercado internacional que aspira a una mejor calidad de vida. Europa mira con mucho interés los productos que se elaboran siendo uno de los principales mercados de exportación del Perú.
Una de las contrapartes es la Biopiratería. Segun wikipedia:
No es sólo el contrabando de diversas formas de vida de la flora y fauna, pero principalmente, la apropiación y monopolización de los conocimientos de las poblaciones tradicionales en lo que se refiere al uso de los recursos naturales. Aún existe el hecho de que estas poblaciones están perdiendo el control sobre esos recursos. Sin embargo, esta situación no es nueva en la Amazonia. Esa biopiratería perjudica Amazonia porque ella hace disminuir el número de especies de la fauna y de la flora. Las informaciones de un grupo de individuos acumulados por años, por lo tanto es un bien colectivo, y no simplemente una mercancía que se puede comercializar cómo cualquier objeto de mercado.