15 Consejos para un autoestop exitoso: Habla el chofer.

consejos-autoestop-mochileros

Es fácil escuchar consejos de miles de trotamundos que viajan a dedo, pero pocas veces escuchamos lo que tiene que decir el conductor. Aquel amigo chofer que va por la ruta y decide si llevar o no a ese autoestopista varado en el camino.  Anteriormente te enseñamos cómo hacer autostop.  Hoy te dejamos  15 consejos por alguien que suele levantar mochileros en la ruta.

Escrito por Al Kleiman:

SUGERENCIAS PARA HACER DEDO DE ALGUIEN QUE SUELE LEVANTAR “DEDEROS”

«No necesito motivos para salir a la ruta. Lo hago ya sea porque tengo que ir a algún lado, o porque no tengo que ir a ningún lado, voy con un destino fijo, o sin destino, sólo por el simple hecho de viajar. Con esto aclarado, yo suelo levantar gente que hace dedo, y haciendo una especie de autoanálisis sobre por qué a veces paro para levantar a alguien, otras veces sigo de largo y otras acelero, llegué a algunas conclusiones que, quizás, les resulten útiles a la hora de hacer dedo, vistas desde “el otro lado”.

Antes de pasar a las sugerencias piensen lo siguiente. Normalmente la decisión de parar para subirte o no se toma en pocos segundos; a veces en menos de un segundo. Entonces tenés pocas posibilidades de aprovechar ese instante. Aquí algunas de las sugerencias. Quizás con los camiones es distinto, no lo sé porque no manejo un camión. Manejo un auto.

1. Si no te puedo ver la cara, no te subo.

Punto. Entonces, cuando pase un auto tratá de hacer contacto visual con el conductor. Nada de capuchas, gorras, etc. Necesito verte la cara y confiar de inmediato en vos. Una sonrisa ayuda mucho, al igual que un gesto simpático.

2. Un cartel con tu destino, ayuda mucho.

Primero porque probablemente vea el cartel antes que a vos entonces ya captaste mi atención. Recomiendo que los destinos no sean muy lejos de donde estás. Por ejemplo, si vas a las Cataratas del Iguazú y estás en Zárate, no pongas “Iguazú”. Poné “Gualeguaychú” por ejemplo. ¿La razón de esto? Suponiendo que te suba, no sé si me vas a caer lo suficientemente bien como para bancarte un viaje de más de 1000 km. Quizás 200 km puede “tolerarte”. Después, en la charla, por ahí surja la mejor onda y te lleve hasta Río de Janeiro si es que querés seguir subiendo. Pero habrá que verlo. También puede ser buena idea, como leí en estos días que le sugirió el tío a alguien, aparte de tu destino podés poner algo como “Cebo buenos mates”. Con eso ya me caíste, si no bien, al menos mejor.

3. Viajá con tu mochila, pero no te mudes.

Si llevás tu mochila y tu contrabajo porque es tu fiel compañero de aventuras, me pone muy contento que hayas encontrado un amigo que te banque en todas, pero se te va a complicar un poco esto de hacer dedo…

4. Si te suben, sé buena onda, simpático y amable.

Pero no sumamente confianzudo, al menos hasta que la charla, tal vez, te lleve a tomar confianza.

5. Tené un aspecto limpio y prolijo.

Hay una gran diferencia entre estar sucio por el viaje y ser sucio. Y esa diferencia se nota a primera vista. No quiero tener que lavar mi auto en Lysoform cuando te bajes o, peor aún, bañarte a vos en Lysoform cuando te subas.

6. Un “hola” seguido de un “muchas gracias”

es un buen inicio de la conversación.

7. Paciencia y buen ánimo.

Si hace tres horas que estás parado al borde de la ruta, nadie te subió y estás con un mal humor que asusta hasta a hipopótamos en celo, no es mi culpa. Yo te acabo de ver. Si me das la espalda o hacés un gesto desganado o algo así, no sólo que no voy a parar, sino que probablemente considere muy seriamente la posibilidad de pasarte por arriba.

8. Insiste.

Cuando un auto no te para al instante, si el conductor tuvo alguna mínima duda, probablemente te siga mirando por el espejo retrovisor. Hacé un gesto amable, como un chau con las manos, un buen viaje que se pueda leer en tus labios. Probablemente clave los frenos y retroceda para buscarte.

9. En el auto

Si te levantan, el conductor tiene que parar en el camino a cargar nafta y después te dice que va un minuto al baño, bajá de inmediato del auto. Es un gesto de consideración ya que evitarás que el conductor tema por sus cosas. Todavía no hay tanta confianza.

10. Difícilmente suba a más de dos.

Tres es casi impensable a no ser que, con mi totalmente subjetiva subjetividad, los vea como ángeles caídos en la Tierra.

11. Un buen lugar para hacer dedo

Son los puestos de peaje, las estaciones de servicio, frente a las estaciones de la policía caminera.

12. Suspicacia

Si estás parado en la ruta en el medio de la nada misma, a 50 km de cualquier cosa que parezca habitada por seres humanos, necesariamente voy a sospechar y voy a suponer que alguien te bajó ahí porque no pudo resistir más tu presencia.

13. Precaución

Si sos mochilero haciendo dedo, tené tu mochila. Si estás con un bolsito de mano en medio de la ruta, sin mochila, sin aspecto de estar viajando, necesariamente voy a suponer que en ese bolsito lo que tenés es un arma. Y voy a acelerar.

14. Ni se te ocurra llevar droga

(eso incluye desde marihuana hasta drogas duras, pasando por una caja de somníferos sin receta o esas cosas). Me importa muy poquito tu opinión sobre la necesidad de legalizar el consumo. Si me para la policía, y encuentran droga y yo me como un problema, te soy claro: te voy a suicidar en tu presencia. Y con un grisín desafilado para que te duela más.

15. Establecer relación

Llevé a muchas personas que hacían dedo. Sigo siendo amigo de todos. Es una excelente manera de aumentar el placer del viaje. Hacé que sea un placer viajar con vos. Quizás hasta podamos arreglar para que a la vuelta te pase a buscar por donde estás. Sucedió.

Mochileros

Mochileros.org es el sitio más grande para mochileros en habla hispana. Lee más aquí

Artículos Relacionados

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba